ABRE SURCOS DE POESÍA.
Al hermano poeta.
«Sobre la melga soledosa
el poeta canta fuera de la historia
los secretos de la semilla»
Alejandro Rivier.
En un tiempo sin tiempo la alegría
alza un faro de clara encarnadura
es la sombra de un hombre y su tristura
huye cuando se enciende la poesía.
Su sueño de la noche labra el día
el amor lo conduce a su estatura…
en el surco que abrió hay dicha pura
de la tierra que ofrece cuna y guía.
La mano del poeta se estremece
su carne en el papel sangra y porfía
palabra y sembrador hacen la historia
y él sabe que si le pertenece.
Su libro es el arado en que confía…
sus páginas de pan saben a gloria.
Favio Ceballos.