He buscado entre mis dos lunas,
He buscado entre mis dos lunas,
el olor de tu presencia,
la noche se hace fresca
y desde que marchaste al otro barrio,
un vacío sin ruidos hace eco
en mi alma solitaria,
tus oraciones las siento
en estas paredes húmedas de lágrimas,
todavía te recuerdo en tu andadera,
dando pasos lentos,
¡ah, mundo cuando te podía ver!
esa mirada honda y alegre,
aquellos despertares donde me colocabas
mentol en la espalda,
para calmar el fantasma del asma,
querida madre, cómo me cuidabas
en mi edad de niño,
ahí te apareces todavía en mis sueños,
rezo por ti mamá
y por todas esas madres
que hoy te acompañan,
para ti y para ellas,
reciban este ramo de rosas rojas,
benditas madres.
José Argenis Peña Salcedo.
