LAS NOCHES NO SON IGUALES
Llegan las noches, nunca iguales.
En la necesidad oculta, someto desde el día
los deseos de largas horas,
la tolerancia de grandes pensamientos,
el dichoso momento de la helada esperanza.
Los puentes del sueño que nos desunen
en nuestro caminar cansado
con la puerta cerrada.
No son iguales las noches,
algunas llevan la soledad en las manos,
otras, plenas de insomnio como gaviotas,
aletean en la penumbra naciente de la tarde.
La noche vive, me espera entre los sueños,
para que acorte la distancia entre tu boca y la mía.
José Manuel F. Febles.
España.