4. Mejorar nuestro estilo de redactar.
Muchas veces no nos damos cuenta de la forma como por esta acción el lenguaje personal se enriquece:
El vocabulario se ensancha.
Se fija la ortografía en el cerebro para usar correctamente las letras, acentos y signos de puntuación.
Al disfrutar la forma de expresarse de los grandes escritores, palpamos en su estilo, los juegos de la sintaxis y sus recursos para el embellecimiento de la palabra escrita.
Con todo esto perfeccionamos nuestro estilo de expresión oral y escrita, en una constante retroalimentación, dotándolo de un mayor nivel de belleza.
Continuará…
Phillip H. Brubeck G.