LA SOLEDAD
Cada noche la soledad duerme en mi cama
se apodera de ella y de mis sueños
tiene la esencia fría, no conversa
me hace pensar en otras cosas
me hace mirar al techo sin pestañear
me hace recordar momentos olvidados
y se envuelve en las sábanas
cuando apago la luz.
Y en esta soledad, ya no persigo sueños
que se quedaron en la esquina de mi mente,
no persigo cosas que ya pasaron,
sepulté momentos pasados
en las calles inertes de mi corazón;
ya no persigo amores que se quedaron
a la deriva del camino,
no persigo amistades que no miran de frente
tampoco esa palabra de aliento con puñal.
La soledad es una droga que no puedo dejar,
su compañía es una adicción que me envuelve
cada noche en las redes de mi cama vacía.
Aquiles Ríos Parra.