NUNCA SERÁ LUZ
Arrojaban angustias de los sueños
hasta la luz del alba,
en aquel cielo azul que miramos
sangrando, por mostrar
soledad mezquina, impronunciable.
Desconocen mis ojos
el final de esta aurora
porque llegó un eclipse de infinita tristeza,
y nunca será luz para un jilguero ciego.
José Manuel F. Febles .
del poemario «Vivir sin olvidar».