SI ACASO PREGUNTAS
Si acaso preguntas por mi espejo roto:
no tengo respuesta.
No sé si fue el viento o el ala de un ángel
quien rompió en silencio la voz del espejo.
Si fue la reseca quietud del invierno
o las espirales de una mariposa,
no tengo respuesta.
Si acaso preguntas de mis alegrías,
diré que se fueron a dormir temprano
y tal vez no vuelvan a mi casa sola.
Acaso no vuelvan más por mis arpegios,
por la superficie tersa del rocío
que tiembla en los dedos mágicos del alba.
Mi espejo, mi casa, mis auroras rotas,
la voz apagada de mis caracolas
vagando en la arena.
Si acaso preguntas por qué no te olvido:
no tengo respuesta.
Everardo Antonio Torres González.