Las comillas es un signo ortográfico doble, es decir, se usa al inicio y al final de la palabra o frase que enmarca.
Las hay de tres tipos: latinas o españolas (« ») se escriben a mitad del renglón, mientras que las inglesas (“ “) y simples (‘ ‘) se ponen en la parte superior del renglón.
1. Su principal uso es delimitar un enunciado que se inserta en la idea principal con algún fin específico, ya sea porque no son del autor o de quien habla, o para distinguir los pensamientos.
a) Para indicar la transcripción textual de una cita.
Profundamente conocedor de la psicología humana, Stefan Zweig afirma que «personalmente, me produce mayor satisfacción comprender a los hombres y no condenarlos», lo cual es una clave para las buenas relaciones humanas.
b) Para reproducir palabras textuales.
El fiscal general aseguró que “la investigación se hizo a conciencia para acumular todos los elementos incriminatorios”, por lo que el presunto homicida obtendrá la condena que merece.
c) Para enmarcar pensamientos en una narración.
– Sí mamá, ahorita limpio el cuarto. “¡Ah como da lata! -dijo para sus adentros- siempre la misma canción”. Nada más termino mi tarea.
2. Para títulos de libros, publicaciones o nombres de establecimientos.
“El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha”.
Zarco escribió en el periódico “El Siglo XIX”.
Mercería “El botón de oro”.
3. Suelen utilizarse para dar cierto énfasis a una palabra, o simplemente, imprimirle un sentido irónico.
Ante las “sugerencias” de su jefe, Pedro decidió “voluntariamente” quedarse a trabajar durante sus vacaciones.
Cuando se abusa de las comillas en este sentido, el signo pierde fuerza y el efecto estilístico de ironía acaba por ser prácticamente insignificante.
4. Cuando se usan neologismos, barbarismos, palabras de otro idioma o tecnicismos poco conocidos.
El “sargento” sirve para presionar las piezas de madera que se ensamblan.
Los “stands” de la feria, se vendieron muy caros.
Desde “endenantes” andaba detrás de ella.
5. Se entrecomillan los apodos de las personas.
Cuando llegó al taller, de inmediato “El tuercas” la atendió.
6. También sirve para hacer explicaciones lingüísticas.
El principal sonido de la letra “x” en el español, es el de “ks”, aunque sigue manteniendo en algunas palabras el de “j”.
