EL GRITO QUE ME BUSCA
Violín gemido
como mariposa rondando mi hombro.
Tus notas son arañas
que vuelven a mis manos
y tropiezan con mis zapatos tirados,
con el estuche abierto,
con mi loción after shave
con la ventana que las
desvanece.
Violín gemido
como canción que vuelve
de vagar,
como caricia que se recrea
en la segunda vez.
Tus notas son reproche
que me llama a cuentas
y me deja sin voz.
Violín gemido
como pequeña golondrina de madera
que se aleja y vuelve…que se aleja
y vuelve.
Violín gemido
Tus notas son el grito
que me busca
como me busca el olvido.
Como me ha buscado tantas veces
la sombra de sus ojos
y en la profundidad
se duele de encontrarme
Cómo me ha buscado el abandono
y la tristeza que duerme
en mi camisa,
como me ama y maldice
la soledad.
Violín gemido,
como luz mercurial
que juega con mi sombra.
Tus notas son el grito que me busca
y en barca de viento
regresa a tus maderas.
El viento… tus maderas…
(Cómo me duele el viento
cómplice de tu grito.
Ese que sacude las hojas y filtrando
la piel cala en la conciencia.
ese que deja a los cometas suspendidos y no cumple
su cita con los pájaros…
Cómo me duele el viento)
Violín gemido,
como cruz que tensa los clavos,
como grito que me busca…
Everardo Antonio Torres González.
