El momento de la crucifixión.
Caifás disfrutaba ese momento, Jesús era azotado salvajemente por un verdugo, quien no conocía la piedad y cada latigazo iba con más fuerza, con más odio, sobre la humanidad de Jesús. El público ante aquel maquiavélico escenario, observaba cómo la sangre y el sudor caían en el piso. Cada azote era recibido en el cuerpo de Jesús.
Desde mi nave podía precisar todo lo que allí ocurría.
Jimmy Dávila tenía en su mano un gran repollo y comenzó a deshojarlo, lavó cada una de sus hojas y las remojó en agua caliente y agregó unas gotas de vinagre para desinfectarlo.
Avelino, había escapado de Portugal, se vino por la costa y en un barco logró escapar. Llegó a Venezuela y hoy con su pelo pintado de amarillo trabaja en un colegio en Barquisimeto. Se creía el narciso resucitado. Recuerdan la historia de Narciso, cuando este nació el adivino Tiresias le había advertido a su madre la ninfa Liriope, que por ningún motivo podía ver su imagen. Ya que si lo hacía ocurriría su muerte. Recuerdan cuando Narciso corría por los bosques y muchas mujeres lo querían por su irresistible belleza.
Después de la salvaje paliza, llegó el momento de la crucifixión, le colocaron un casco de espina y comenzaron a colocar unos fríos clavos en sus manos y lo sujetaron entre varios soldados.
Jimmy Dávila tomo un cuchillo y comenzó a rebanar las hojas de repollo y las coloco en un envase de vidrio.
Recuerdo cuando en mi platillo volador vi al Rey de los reyes llegar en un asno. Había. Mucha alegría, era el Cordero de Dios, quien había llegado para la salvación de la humanidad.
Fue entonces cuando la ninfa Eco, conoció a Narciso, este se burló de ella porque al hablar solo se escuchaba el sonido final de las palabras. Hera la esposa de Zeus, le castigó, porque Eco era una ninfa habladora y entretenía a Hera narrándole historias mientras su esposo Zeus, se acostaba con otras mujeres. Avelino estaba muy contento porque había heredado la vanidad de Narciso.
Cuando Jesús estaba en la cruz. El cielo comenzó a borrar sus colores y se volvió oscuro. Jesús miró al cielo y dijo: ¿Señor por qué me has abandonado? En ese momento el cuerpo de Jesús sintió el peso de los pecados de la humanidad. Inclinó su cabeza y comenzó a caer una lluvia muy fuerte, la tierra se abrió y el velo diseñado por Dios, que estaba en la sinagoga se rasgó. Se escuchaban como patas de caballos que corrían por el piso del cielo.
Jimmy Dávila preparaba unas exquisitas tortas de repollo, bañadas con huevos y harina, después de haberlas sofreído en aceite de oliva.
La noche estaba muy solitaria y silenciosa, habían crucificado al Señor.
Tomé mi nave y me dirigí a otros rumbos, había un incendio, en la frontera de México, morían unos inmigrantes, cuarenta aproximadamente. Conocí personalmente a Némesis, diosa de la venganza. La misma que castigó a Narciso, quien se burló de Eco. Está diosa hizo que le diera mucha sed a Narciso y al buscar agua en el río, este se cayó y se ahogó. Jimmy Dávila es muy solidario con sus amigos, desde el Norte les envía obsequios y su familia es muy unida. Además de cocinar se aplica a cualquier oficio.
Estaba buscando los escritos de Phillip, creo que Avelino es uno de esos personajes, cuyas historias no las disfrutan y se escapan cuando estamos agotados y luego están haciendo sus propias historias.
José Argenis Peña Salcedo.
